Camilo Losada tiene 26 años y desde hace tres años, ha visto cómo el mundo laboral le cierra la puerta. Su nombre corresponde, desde que cumplió 23, al de un hombre, su identidad de género desde mucho tiempo atrás también, pero en su tarjeta de identificación aparece bajo el rótulo «femenino». Es transexual y la normativa que hasta ahora existía en su país, Colombia, le había impedido dar el paso que le faltaba para que su aspecto físico, pensamiento y nombre fueran coherentes con el género que lo identifica en sus documentos.
Su historia cambió esta semana con un decreto presidencial que permite el cambio de sexo en los papeles de identificación con tan solo un trámite administrativo. Por eso a Camilo Losada, uno de los primeros colombianos en hacerlo bajo la nueva norma, no le exigieron ningún examen médico ni psicológico para iniciar el proceso que en menos de cinco días le dará un nuevo documento.
Colombia modificó el modelo y facilitó el trámite para construir “una sociedad igualitaria, para cumplir esa promesa de la Constitución consistente en que cada persona pueda desarrollar su vida de acuerdo a la construcción que realice de su identidad”.
Mauricio Albarracín, director de la ONG Colombia Diversa, explica que el avance principal del decreto es que ya no se necesita un examen médico que reconozca una transformación corporal ni otro psiquiátrico que asegure que la persona tiene disforia de género. “Ahora se está valorando a la persona como ser humano y se dejan atrás procesos que invadían la intimidad”, dice el activista.
El abogado Germán Rincón Perfetti apunta que además del trámite médico que exige una cirugía de reasignación de género, en adelante tampoco se tendrá que acudir a la vía jurídica. Explica que antes del decreto las personas que aspiraban a hacer el cambio debían ir ante un juez que analizaba los exámenes y a partir de eso tomaba una decisión, lo que implicaba la asesoría de un abogado y al menos varios meses de espera. “Quienes tienen una identidad de género distinta a la asignada de nacimiento enfrentan muchos problemas para que su proyecto de vida esté acorde con su identidad. Este decreto facilita enormemente la identidad legal con la realidad de la persona”
Por eso, la presidencia, como órgano rector del sistema de notarías del país, promulgó el decreto para que no se acuda a vías judiciales para lograr el cambio de género. En el anuncio de la normativa, el ministro de justicia recordó la importancia de garantizar el derecho a que los colombianos y colombianas tengan las mismas garantías y recordó una frase del escritor Gabriel García Márquez: “Los seres humanos no nacen para siempre el día que sus madres los alumbran: la vida los obliga a parirse a sí mismos una y otra vez, a modelarse, a transformarse”
Todo un paso adelante por Colombia y su nueva ley que valora la necesidad de una persona transexual realizar el cambio de su nombre y sexo en su documentación, y sin tener que ser tratad@ como un enfermo mental para tener el cambio. LGTBI«COLOMBIA).