¿Qué es la sífilis?
Es una infección de transmisión sexual ocasionada por la bacteria Treponema pallidum.
¿Cómo se transmite?
Se transmite durante las relaciones sexuales vaginales, anales u orales sin preservativo por el contacto con las heridas abiertas (chancros) de una persona infectada.
Tener sífilis también puede aumentar la posibilidad de que una persona sin VIH se infecte si se expone al virus.
Síntomas
Puede provocar una serie de síntomas o ser asintomático. Si no es tratada a tiempo la enfermedad atraviesa tres etapas:
- Sífilis primaria: Después de un período de incubación de 3 días a 3 meses (3 semanas promedio), en la boca, el pene, la vagina o el ano, puede aparecer una lesión no dolorosa parecida a una herida abierta, que se llama chancro. Estos síntomas son difíciles de detectar porque por lo general no causan dolor, y en ocasiones ocurren en zonas difícilmente visibles como boca, cuello del útero, vagina o recto. Una persona que no ha sido tratada puede infectar a otras fácilmente durante esta etapa.
- Sífilis secundaria: Puede presentarse 4 semanas después de la desaparición del chancro y dura de tres a seis meses. Provoca ronchas rosáceas indoloras en la piel, que pueden aparecer en la cara, pecho, espalda, palmas de las manos y plantas de los pies. También puede dar fiebre, dolor de garganta y de articulaciones, pérdida de peso, caída de cabello, ceja rala, cefaleas y falta de apetito. En la etapa secundaria es posible trasmitir la sífilis al tener contacto con la piel de alguien si tiene las ronchas rosáceas.
- Sífilis terciaria o tardía: La tercera fase puede darse entre uno y veinte años después del inicio de la infección. La bacteria puede atacar directamente al sistema nervioso, corazón e hígado. Puede causar serios problemas, pudiendo ser incluso irreversibles e incluso provocando la muerte si no se trata.
Tratamiento:
Esta infección tiene cura en todas sus fases mediante antibióticos. El haberse tratado y curado no implica inmunidad de por vida, ya que se puede volver a contraer.
Si tienes alguno de estos síntomas acude a tu médico de cabecera o centro de ITS de referencia. Recuerda que no siempre se presentan síntomas, por lo que lo más recomendable es que todxs nos hagamos nuestra ITV Sexual al menos una vez al año.